El Ferrari Roma, elegante y deportivo a partes iguales, comparte mecánica con el Ferrari Portofino M (V8, bi-turbo, 620 CV, en posición delantera-central) pero adopta un enfoque más refinado y minimalista, inspirado en los Ferrari clásicos de los años 50 y 60. Este coupé 2+2, de líneas fluidas y diseño limpio, es una oda a la dolce vita italiana, combinando la sofisticación urbana con el alma de un verdadero deportivo.

Una vez en marcha, el V8 turboalimentado del Roma emite una melodía ronca y refinada, con un sonido progresivo que crece a medida que se exprime el acelerador. Aunque los turbos suavizan el rugido en comparación con los Ferrari atmosféricos, la potencia es abundante y la aceleración casi instantánea, gracias a la magnífica caja de cambios de doble embrague de 8 velocidades, que proporciona transiciones rápidas y suaves.

En cuanto al chasis, el know-how de Ferrari se percibe desde el primer kilómetro. El Roma se muestra ágil y preciso, con una suspensión adaptativa que mantiene un equilibrio perfecto entre confort y rendimiento. El tren delantero se inscribe con facilidad en las curvas, transmitiendo un excelente feedback al conductor, mientras que el sistema de control de tracción y estabilidad (Side Slip Control) permite una conducción dinámica sin comprometer la seguridad.

Los frenos carbocerámicos, firmados por Brembo, aseguran una frenada potente y progresiva, que se transmite sin vacilar al asfalto gracias a los neumáticos Michelin Pilot Sport 4S, perfectos para gestionar tanto la aceleración como las curvas más demandantes. Todo ello contribuye a una experiencia de conducción precisa y cautivadora, apta tanto para recorridos largos como para tramos de carretera más exigentes.

El conductor del Ferrari Roma tiene a su disposición el Manettino, que permite seleccionar entre los modos de conducción Rain, Confort, Sport y ESC Off, cambiando la respuesta del motor, la rigidez de la suspensión y el nivel de intervención electrónica, según el tipo de conducción y las condiciones de la carretera.

El interior es un reflejo del estilo sobrio pero lujoso del Roma. Combina tapicería de cuero premium con detalles en aluminio, destacando una consola central moderna y orientada al conductor, con una pantalla táctil que controla las funciones del vehículo. El diseño minimalista del habitáculo y su sofisticado sistema de infoentretenimiento colocan al Roma a la vanguardia tecnológica, sin sacrificar la esencia clásica de Ferrari.

¿A qué esperas para ponerte al volante de esta magnífica unidad?

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